Azotes y castigos para una jovencita defendiendo su trasero

Una chica joven y de aspecto inocente se encontró en un poco de lío cuando se atrevió a defender su trasero.El hombre severo decidió darle una lección, llevándola al garaje para un castigo duro.Mientras la colocaba sobre su regazo, la joven chorreaba y gimoteaba, sus mejillas tornándose un tono carmesí con cada bofetada.La brutal nalgada continuaba, conectando su mano con un ritmo de punzante que la dejaba jadeando y retorciéndose de dolor.La mano del hombre no se limitaba solo a sus mejilla, ya que también la alcanzaba para pellizcar y torcer sus sensibles pezones, añadiendo una capa extra de agonía a su castigo.Este joven de 18 años estaba ahora bien consciente de las consecuencias de defender su trasero, ya que cada bofete y jalón dejaba suplicar por misericordia.